La Historia no es solo un relato del pasado, sino una herramienta para cuestionar las estructuras de poder y las desigualdades del presente
LA HISTORIA NO ES SOLO UN RELATO DEL PASADO, SINO UNA HERRAMIENTA PARA CUESTIONAR LAS ESTRUCTURAS DEL PODER Y LAS DESIGUALDADES DEL PRESENTE
Yo pienso que lo que Joan Scott sugiere, o intenta decir con esta frase es que la Historia no puede considerarse únicamente como una narrativa objetiva de acontecimientos pasados, sino más bien como una disciplina crítica a través de la cual analizar cómo se construyeron las estructuras de poder y las desigualdades sociales. Su premisa es que el conocimiento histórico es una herramienta para comprender y desafiar las jerarquías actuales de género, clase, raza y otras formas de opresión.
Tras buscar más detalladamente información sobre esta historiadora he encontrado ejemplos que lo expliquen todo mejor. Un ejemplo concreto de este enfoque es su análisis del género como categoría histórica. Sostiene que el género no es simplemente una diferencia biológica sino también una construcción social con raíces en procesos históricos específicos. Por ejemplo, al analizar la Revolución Francesa, Scott muestra que los derechos universales proclamados en ese período en realidad excluían a las mujeres, afianzando así su subordinación política y social. Esto pone de relieve una injusticia del pasado pero, lo que es igualmente importante, plantea interrogantes sobre por qué las desigualdades de género persisten hoy.
Otro ejemplo podría ser el relato de la historia del trabajo. Durante mucho tiempo se centró en el trabajo de los hombres en las fábricas y en los sindicatos, invisibilizando así el trabajo de las mujeres en el hogar y los cuidados, que han sido tan críticos para sostener la economía. Recuperar estas historias puede sentar las bases para cuestionar las desigualdades económicas y de género que aún existen en la actualidad