“No podemos hacer la historia, sino sólo esperar a que se desarrolle”
“NO PODEMOS HACER LA HISTORIA, SINO SÓLO ESPERAR A QUE SE DESARROLLE”
Esta frase dicha por el ex canciller del Reich alemán Otto Von Bismarck nos invita a reflexionar sobre nuestra relación con el tiempo y los acontecimientos que nos rodean. También sugiere una perspectiva humilde frente se al poder de los personajes en el gran marco de la historia, como si esta tuviera su propio curso…
Aunque Bismarck parece afirmar que somos meros espectadores del flujo histórico, también podría ser una llamada o aviso a aceptar que no siempre tenemos control total sobre los grandes procesos.
Esto no implica resignación, sino el reconocimiento de que hay fuerzas mayores (sociales, económicas culturales) que escapan a la voluntad individual.
Pero al mismo tiempo, debemos recordar que la historia no se escribe sola. Cada pequeño acto, cada decisión y cada pensamiento que sembramos en el presente, aunque parezca insignificante, puede influir en el desarrollo de los eventos futuros. Si bien no siempre podemos ver el impacto inmediato de nuestras acciones, somos parte del tejido que conforma la Historia. Esperar, entonces, no es necesariamente pasividad; puede ser una forma de contemplar, de aprender y de prepararse para actuar cuando las circunstancias lo permitan.
Para terminar, esta frase nos invita a considerar como estamos posicionados dentro de la Historia; a veces somos agentes de cambio y otras, testigos de fuerzas que van más allá de nuestra capacidad de influencia. Pero siempre, de alguna manera, estamos entretejiendo la historia con nuestra pequeñas y grandes acciones.