Quien no se mueve no escucha el ruido de sus cadenas". Rosa Luxemburgo
Quien no se mueve no escucha el ruido de sus cadenas
Rosa Luxemburgo
"Quien no se mueve no escucha el ruido de sus cadenas" es como una metáfora que nos incita a reflexionar sobre la libertad y la necesidad de saber todo sobre nuestra verdadera realidad. Este pensamiento nos hace trae con una verdad incómoda, ya que muchas veces vivimos atrapados en la tipica rutina de estudiante o trabajador, normas que cumplir o creencias que aceptamos sin pensar profundamente, simplemente porque no nos hemos atrevido a cambiarlo, a explorar o a desafiar lo tipico y cambiarlo por algo nuevo.
El movimiento en este contexto, no solo se refiere a la acción de moverse con cadenas, sino también al movimiento mental y emocional. Es el cuestionar lo que damos por hecho, a salir de nuestra zona de confort y a enfrentar los desafíos que vienen con el cambio, el cual sabemos que va a ser duro. Sin ese movimiento, las cadenas que representan la ignorancia, el miedo o el miedo se quedan invisibles, silenciosas, pero igualmente no te dejan moverte del sitio y te mantiene atrapado.
Moverse en este caso se refiere a que tienes que hacer un esfuerzo extra y sentir incomodidad, porque al hacerlo, nos damos cuenta de nuestras limitaciones. Sin embargo, esa incomodidad es el primer paso hacia la verdadera libertad. Escuchar el ruido de nuestras cadenas no es agradable, pero es necesario para saber o que representan y, mas tarde poder deshacerte de ellas.
La reflexión también nos invita a mirar más allá de lo individual. Las cadenas no siempre son nuestras individualmente, a menudo son sociales o culturales. Permanecer sin actuar ante la injusticia o la opresión de alguien o algo significa aceptar esas cadenas, tanto propias como ajenas. El movimiento colectivo es super importante para el cambio, y reconocer nuestras cadenas compartidas puede ser el comienzo de una transformación.